Nunca Se Sabe Racing Club es un proyecto ideado por la Yeguada Torreduero. Durante años nos hemos dedicado a la cría de caballos de carreras (pura sangre inglés) que eran comprados por diferentes cuadras o particulares para competir en los mejores hipódromos nacionales e internacionales. Nuestro amor por los caballos y nuestra firme intención de acercar el mundo del caballo al público nos ha llevado a desarrollar una fórmula existente desde hace mucho tiempo en el Reino Unido que consiste en la multipropiedad ordenada y profesionalizada del caballo. Así, podemos compartir la emoción de ver competir y ganar a nuestros caballos junto con otros aficionados a este maravilloso deporte. Contamos al comienzo de 2021 con un potro nacido en 2018, Natural Talent (Lightning Moon), en el patio de Guillermo Arizkorreta y del que esperamos lo mejor para la próxima temporada.
Comenzó a montar a los diez años en un club cercano a Donostia y con su grupo de amigos empezó a frecuentar Lasarte y a aficionarse a las carreras. Un verano fue a montar a Inglaterra, a la cuadra del mítico Sir Henry Cecil, y asegura que fue como entrar en otro mundo, lo que le permitió ver la dimensión del «turf» en Inglaterra. En el año 2000 terminó su carrera universitaria (Administración y Dirección de Empresas) y comenzó a trabajar a la cuadra del prestigioso entrenador Luca Cumani. Estuvo un año de segundo asistente, lo que le permitió conocer los entresijos de una gran cuadra. En otoño de 2007, y con el apoyo de José Hormaeche y de Felipe Hinojosa, aterriza en España con su nueva y flamante licencia de preparador y sólo dos caballos. Actualmente tiene alrededor de 75 caballos en la cuadra, el patio más poblado del centro de entrenamiento de La Zarzuela, y muy pocos propietarios han abandonado su patio en estos años. De cultura trilingüe (español, inglés y francés), es ganador de casi todos los grandes premios españoles, de casi 600 carreras y vencedor del Campeonato Nacional de Entrenadores en las siete últimas campañas. Visite su web pinchando aquí.
Los paralelismos entre la puesta a punto del caballo y sus experiencias deportivas vividas como jugador de waterpolo de Primera División Nacional en la liga española, le resultan muy interesantes y fructíferas a la hora de tomar la decisión de hacerse preparador de caballos de carreras. Tras licenciarse en Historia en la Universidad de Deusto, en Bilbao, y con una formación trilingüe (español, inglés y francés), Patrik toma la decisión de orientar su carrera profesional hacia el mundo de los caballos de carreras con el principal objetivo de convertirse en preparador. Después de trabajar en el centro de entrenamiento de Les Aigles en Chantilly y en la Rehab Unit de Shadwell, se traslada a Pau, para trabajar con el preparador Françoise Rohaut, donde aprende lo que es la puesta a punto del caballo para una carrera. Los conocimientos adquiridos progresivamente dan a Patrik la oportunidad de trabajar en la preparación de caballos de alto nivel. En 2018 inicia con éxito su trayectoria como entrenador público en España, habiéndose convertido ya en uno de los profesionales con más y mejor futuro del país. Para visitar su página web, pinche aquí.
Es una de las grandes promesas del «turf» español. Nacido en Sevilla en septiembre de 1991, obtuvo la licencia para ser preparador a comienzos de 2018. En ese ejercicio ya se convirtió en una de las grandes revelaciones de nuestras carreras, por sus victorias totales y por las conseguidas en grandes premios. Previamente, Álvaro estuvo formándose en Inglaterra y en Francia con Carlos Laffon, del que aprendió, entre otras cosas, que en una cuadra se debe tener hasta el más mínimo detalle bajo control. En su segunda campaña como entrenador profesional, tiene ya una veintena de caballos bajo su responsabilidad. Álvaro habla cuatro idiomas (español, inglés, francés e italiano) y es graduado en Dirección y Administración de Empresas.
Comenzó a montar a los diez años en un club cercano a Donostia y con su grupo de amigos empezó a frecuentar Lasarte y a aficionarse a las carreras. Un verano fue a montar a Inglaterra, a la cuadra del mítico Sir Henry Cecil, y asegura que fue como entrar en otro mundo, lo que le permitió ver la dimensión del «turf» en Inglaterra. En el año 2000 terminó su carrera universitaria (Administración y Dirección de Empresas) y comenzó a trabajar a la cuadra del prestigioso entrenador Luca Cumani. Estuvo un año de segundo asistente, lo que le permitió conocer los entresijos de una gran cuadra. En otoño de 2007, y con el apoyo de José Hormaeche y de Felipe Hinojosa, aterriza en España con su nueva y flamante licencia de preparador y sólo dos caballos. Actualmente tiene alrededor de 75 caballos en la cuadra, el patio más poblado del centro de entrenamiento de La Zarzuela, y muy pocos propietarios han abandonado su patio en estos años. De cultura trilingüe (español, inglés y francés), es ganador de casi todos los grandes premios españoles, de casi 600 carreras y vencedor del Campeonato Nacional de Entrenadores en las siete últimas campañas. Visite su web pinchando aquí.
Los paralelismos entre la puesta a punto del caballo y sus experiencias deportivas vividas como jugador de waterpolo de Primera División Nacional en la liga española, le resultan muy interesantes y fructíferas a la hora de tomar la decisión de hacerse preparador de caballos de carreras. Tras licenciarse en Historia en la Universidad de Deusto, en Bilbao, y con una formación trilingüe (español, inglés y francés), Patrik toma la decisión de orientar su carrera profesional hacia el mundo de los caballos de carreras con el principal objetivo de convertirse en preparador. Después de trabajar en el centro de entrenamiento de Les Aigles en Chantilly y en la Rehab Unit de Shadwell, se traslada a Pau, para trabajar con el preparador Françoise Rohaut, donde aprende lo que es la puesta a punto del caballo para una carrera. Los conocimientos adquiridos progresivamente dan a Patrik la oportunidad de trabajar en la preparación de caballos de alto nivel. En 2018 inicia con éxito su trayectoria como entrenador público en España, habiéndose convertido ya en uno de los profesionales con más y mejor futuro del país. Para visitar su página web, pinche aquí.
Es una de las grandes promesas del «turf» español. Nacido en Sevilla en septiembre de 1991, obtuvo la licencia para ser preparador a comienzos de 2018. En ese ejercicio ya se convirtió en una de las grandes revelaciones de nuestras carreras, por sus victorias totales y por las conseguidas en grandes premios. Previamente, Álvaro estuvo formándose en Inglaterra y en Francia con Carlos Laffon, del que aprendió, entre otras cosas, que en una cuadra se debe tener hasta el más mínimo detalle bajo control. En su segunda campaña como entrenador profesional, tiene ya una veintena de caballos bajo su responsabilidad. Álvaro habla cuatro idiomas (español, inglés, francés e italiano) y es graduado en Dirección y Administración de Empresas.
El Racing Club (o multipropiedad) funciona de manera muy sencilla. Cada año, Nunca Se Sabe compra caballos para después venderlos en participaciones. Los caballos que se eligen serán de diferentes características según las personas que estén interesadas. Hay caballos más precoces, con los cuales no se necesita tanto tiempo para prepararlos y entrenarlos y por el contrario hay caballos más atrasados con los que normalmente se tarda más en poder debutar. La idea es poder tener una cuadra equilibrada donde tengamos caballos de diferentes edades y orígenes, de tal manera que nos permita poder acercarnos a diferentes perfiles de compradores. Nunca Se Sabe se queda con una parte de la participación y se ocupa de gestionar la contratación de todos los servicios que requiere el cuidado y el entrenamiento del caballo y la logística para las carreras. También ofrece a los aficionados compartir la titularidad de la propiedad del caballo.
Cuando llega el momento acordado para vender el caballo se convoca una reunión previa de todos los socios-propietarios de dicho caballo para decidir qué hacer, si vender, por cuánto en caso afirmativo, reparto de posibles ganancias o incluso la aportación de una nueva cuota para seguir otro año más con el caballo. Cada acción tendrá un voto en dicha decisión.